Cuando este curso comenzó, conocí a la maestra quien se presentó haciendo énfasis en dos aspectos importantes de su persona: que era del signo Géminis (1y1), por lo tanto era una maestra DUAL, y que dependiendo del accionar de su gemelo la dinámica de la clase podría cambiar. Por otro lado dijo llamarse Blanca Estela (1 y 1 ).
Esto se vio reflejado de inmediato, pues la constante de las clases fueron los cambios, no hubo clases iguales. Pensé entonces que debería acostumbrarme a lo mismo y a tratar de entender si ese dualismo sería una especie de proceso en donde ella ofrecería una versión moderna de ese antiguo modo de concebir el proceso de enseñanza-aprendizaje, basado en los cambios constantes y, valga la comparación en Descartes, “quien en su dualismo concebía una versión moderna del hombre constituido por dos realidades, una de las cuales sirve de residencia temporal a la otra que se presenta como la sede auténtica de lo humano”.
Ahora analizo un poco más las cosas y encuentro en ella dos números especiales el 1 y el 11 que, en la literatura de la numerología, significan en primera instancia el ser número 1 que representa el principio y el fin, el líder, el maestro que forma líderes y los conduce por el camino de la sabiduría, manteniendo siempre una constante en su vida: el cambio.
Por otro lado, también está presente el número 11, que representa el espejo de otras vidas y al maestro de maestros, un ser espiritual, bondadoso, sensible al extremo y con una motivación en su vida a servir y enseñar a los demás.
Maestra Blanca Estela, no sé si llamarla dual o dualista, lo que sí aprendí de usted es a tener un pensamiento crítico, a desarrollar el cambio como una constante, pero sobre todo, aprendí de usted a transmitir las ideas con el fin último de servir para trascender más allá de las fronteras de la mente y los espacios.
Mil gracias por sus enseñanzas!!!
Confundido y triste …… ( al final también resulté dual).
PD: También aprendí a conocer a su tío Beto, su abuelo Ignacio y otros amigos de la familia. Lástima que se terminó!!!
Hola a todos:
ResponderEliminarProbablemente esta sea mi última visita a este enriquecido espacio. Debo confesarles que la motivación estaba siendo impulsada por la obligada participación que nuestra querida Blanca claramente señaló en sus primeras clases. Sin embargo, debo de confesarles también que aprendí a disfrutar de este espacio, de meterme a la computadora para leer los sabios comentarios de nuestro amigo el confundido, de la participación interminable de mi querida amiga abogada, de las divertidas experiencias de Angelica, de las profundas reflexiones de Miriam, de los aplausos y felicitaciones de Blanca. Lo cierto es que, de la obligación paso a ser un espacio de critica, análisis y reflexión interesante, del que me llevo innumerables enseñanzas y sobre todo de la fiel convicción de que hay que seguir adelante pese a todo y sobre todo, a pesar de la tormenta y posiblemente en contra de la corriente. La única esperanza es la posibilidad de ver en nuestros chavos ese cambio tan anhelado, tan necesario para nuestro país.
Ni hablar, hace unos días sentía el mundo encima, con la moral por los suelos, con la desesperanza de la injusticia; hoy veo un futuro lleno de retos, colmado de piedras en el camino, pero con la certeza que en el trayecto iremos haciendo juntos el camino. A todos, mis compañeros gracias, a Blanca toda mi admiración y todo mi respeto,
Ximena
Ximena
Hola confundido, es verdad se acabó, también estoy triste. Gracias por tus comentarios, en todos los casos fuiste amable con mis textos, mucho de lo escribiste me tocó profundamente. Leerte siempre fue de lo mejor.
ResponderEliminarAngélica.
Querido amiguito confundido tu reflexión en el último párrafo me conmovió profundamente pues es precisamente un objetivo de vida, no siempre logro ordenar las miles de ideas que en un momento dado pueden llegar a mi mente y menos aún comunicarlas de manera sencilla y bien estructurada, para mi tu forma más pensamiento y la de Angélica más sentimiento cómo diría Jung forman un equilibrio que deleita, yo me identifico con Ximena pero aspiro a darles alcance mis queridos compañeros.
ResponderEliminarMiriam Redondo
Cuando me encuentro con este tipo de reflexiones re-entiendo por qué soy docente; re-entiendo de dónde sale la energía que me permite continuar; re-entiendo una de las fuentes de mi sentido de vida; re-entiendo quién soy y por qué soy. Gracias por hacer realidad mi ideal de este espacio; en verdad lo he disfrutado y he aprendido muchísimo de cada uno de ustedes y de los demás.
ResponderEliminarQuienes me conocen saben que lamento profundamente todo aquello que nos ha afectado y que quedó fuera de mi alcance; el luchar con la rabia y la impotencia no ha sido grato. Nada ha sido igual, algo se fracturó... y sin embargo, tuvimos que continuar, pero siempre sintiendo la fuerte presencia de alguien que desde su ausencia nos seguía enriqueciendo.
Mi muy estimado y respetado Confundido -y espero que ya no triste-: la belleza de las palabras con que ha sido escrita esta entrada, sólo pueden ser el reflejo de un alma justa y buena. Recuerda lo que Homero decía: "Tan sólo las almas justas y buenas pueden ser fácilmente curadas de cualquiera de sus enfermedades". Desecha de ti todo lo malo que te haya dejado este desagradable episodio y guarda lo bueno que hayas podido encontrar.
Estamos en el camino...
Un abrazo para todos.
Blanca